Durante mis viajes por el mundo suelo llevar diarios con el propósito no sólo de escribir lo que experimento y conozco, sino también para controlar el dinero del que dispongo. Estos pequeños textos son “apuntes” que, aunados a las imágenes recogidas, me permiten, al consultarlos, desencadenar mis recuerdos y, a partir de esto, crear crónicas más vívidas con las anécdotas a flor de piel. En el trayecto me he topado con otros viajeros, quienes me enriquecieron con sus relatos y fotografías.

sábado, 15 de octubre de 2011

Madrid, España. Miércoles, 16 de marzo de 2011.

Miércoles, 16 de marzo de 2011.
Madrid, España. Hotel Convención. Habitación 5048.

1250 euros
15o libras esterlinas

Primero las cuentas:
2 gorras (España y Madrid) €6 (3 c/u)
4 llaveros (España) €6 (1, 50 c/u)
1 playera CCCP (URSS) €12
1 boleto de metrobús €1
3 playeras (España) €14 .70 (4, 90 c/u)
2 emparedados y 1 botella con agua €8, 20
_____
€47, 90 = $814, 30

Un viaje bastante pesado, y apenas comienza. Doce horas de la Ciudad de México a Madrid.
Llegué después del mediodía. Me cambiaron el hotel del itinerario. Primeramente sería el NH Alcalá, y me hospedaron en el Hotel Convención, ubicado en O’Donnell.
Después de disponer de algunos asuntos, tomé mis cosas y salí a caminar.
Madrid está a 10º C; sin embargo, el frío es intenso. El viento hela, e incluso llueve esporádicamente.
Llegué hasta la Gran Vía: pasé por la Puerta de Alcalá, La Cibeles...




En uno de los comercios donde compré las playeras, me enteré de que los dependientes eran peruanos porque ellos me lo hicieron saber algo desconfiados. En otra tienda, donde adquirí la gorra de Madrid, la señora revisó el billete con que le pagué, y me aconsejó que tuviera cuidado, ya que la falsificación de euros era frecuente. Me mostró cómo identificar un billete falso: tocando los relieves.
Tomé vídeo solamente porque me olvidé de las memorias de la cámara fotográfica en el hotel, y me percaté de esto hasta que estaba ya en la Puerta de Alcalá.
Le gente se me quedaba viendo. Vestía totalmente de negro: guantes, pantalón, chamarra, mochila, tenis...
Cuando saqué la cámara de la mochila, las miradas cesaron. Supongo que pensaban que era terrorista.

Estoy cansado. No he comido. Saldré a la tienda a comprar algo —quizá un sándwich y agua. Necesito un baño caliente, y descansar para mañana. Me llevarán a muchos lugares que hoy visité. Aún analizo si tomo la excursión a Toledo, la cual cuesta €41.
Hay muchos adolescentes en el hotel, y hacen ruido. Son brasileños o portugueses.

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